La senda que aquí se describe es un trayecto de fácil recorrido que discurre en el entorno de la reserva natural integral de Muniellos, en el parque natural de Las Fuentes del Narcea, Degaña e Ibias. El inicio de la senda se encuentra en el pueblo de Moal, donde se coge una pista de hormigón que discurre entre las casas y que es la que se debe seguir sin desvío hasta el final de la ruta. En las proximidades de Moal, al otro lado del río, se extiende un bosque de castaños donde se pueden observar varias «corripas», construcciones de planta circular y cerramiento de mampostería de piedra que sirven para almacenar los erizos del castaño y dejarlos «curar» allí hasta que se desprenda más fácilmente su fruto.
Una vez abandonado el pueblo, la senda discurre paralela al río Muniellos, atravesando los prados que ocupan su vega fluvial, y dejando atrás los bosques de castaños. El trazado continúa acompañado de rebollares y hayedos que cubren las laderas a ambos lados. Durante todo el recorrido se pueden ver «cortinos». Se trata de construcciones circulares de piedra cuya misión es proteger a las colmenas de los ataques de los osos.
La ruta continúa por la pista principal, ignorando cualquier camino que pueda partir de ella, hasta llegar al cerramiento de acceso a la reserva natural integral de Muniellos, autentica joya del patrimonio natural asturiano, refugio de especies emblemáticas como el oso pardo y el urogallo cantábrico. Para adentrarse en ella es necesario solicitar un permiso que expide la consejería competente en materia de espacios naturales protegidos, dado que el acceso es restringido y se limita a un número máximo de veinte visitantes diarios. Se toma el camino a mano izquierda que continúa en ascenso entre robles y castaños, primero, atravesando un bello hayedo.
Tras cruzar el bosque de hayas, la senda continúa ascendiendo hacia le mirador de Montecín que se divisa al frente. Desde el mirador se puede observar el pueblo de Moal, el puerto del Connio y la parte baja de la Reserva Natural Integral de Muniellos -Reserva de la Biosfera.
De regreso al camino principal, la senda continúa hacia la izquierda por un hayedo hasta llegar la colláu de Moncóu, cruce de caminos. Se debe de tomar el desvío a mano izquierda que en fuerte pendiente desciende hacia la misma pista que se había utilizado en el ascenso, por la que regresamos a Moal.