El tiempo transcurre lentamente, como detenido, en un entorno ideal para el relax total , para la vida contemplativa que se desgrana contemplando la envergadura y el impresionante escudo nobiliario del Palacio de Mon , o haciendo la ruta en torno a este paraje, o disfrutando con la llegada a la capital del municipio, San Martín de Oscos , que deleita al foráneo con su hospitalidad, con su gastronomía, o con la visita a la iglesia parroquial o a la casa de los Guzmanes…
Si en Asturias hubiera que buscar o imaginar a los guardianes del tiempo, de la memoria, de las costumbres y la vida de los pueblos, sin duda uno de los más poderosos estaría en Los Oscos , una comarca que parece diseñada para la ciencia etnográfica y que puede colmar las expectativas de los viajeros e investigadores que quieren viajar al pasado…Una metáfora perfecta de este tiempo detenido es la Casa del Marco , en Villarquille, una muestra de la vida de los campesinos del occidente más recóndito y auténtico hasta bien entrado el siglo XX.
Por sus ríos y arroyos, sus fuentes, sus dulces valles, el color de sus bosques en otoño, y sus asequibles montañas, los Oscos y San Martín en particular es un lugar más que idóneo para el senderismo.
No te puedes perder:
Palacio de Mon (Mon, para acceder al interior es necesario concertar visita en la Oficina de Turismo).
Iglesia de San Martín de Oscos y Casa de los Guzmanes (San Martín).
Museo “Casa del Marco “, en Villarquille.
Rutas de Senderismo (Ruta de las Minas, Senda Verde, Ruta Monte Marón y Ascuita, Ruta Piorno a los Fornos y Ruta de Mon).